Desde el 22 de octubre, Kellogs’s, la empresa transnacional fabricante de cereales ha sometido a un paro forzoso a 220 miembros de BCTGM, la afiliada de la UITA, en su fábrica de Memphis, Tennessee, en un intento de obligar al sindicato a aceptar un plan que implica un incremento radical en la utilización de trabajadores y trabajadoras eventuales. Con este plan, todos los nuevos trabajadores, serían empleados en forma eventual sin un horario garantizado y con remuneración y beneficios significativamente más bajos, transformando con el tiempo toda la estructura laboral de la planta. La compañía llama a esto "La Nueva Fuerza Laboral del Futuro".
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Kellogg's le llama a esto "La Nueva Fuerza Laboral del Futuro".
Si la compañía tiene éxito, estos trabajadores/as precarios ganarán USD 6.00 menos por hora o USD 12.480 menos al año, previo al tiempo extra, y recibirán beneficios de salud y pensión inferiores.
Kellogg's organizó esta acometida mientras el Acuerdo Marco de 2012, que limita el trabajo eventual, aún está en vigor. El sindicato insiste en que el trabajo eventual debe ser negociado dentro del ámbito del acuerdo – y sus miembros están viendo llegar las festividades de fin de año desde el exterior de los portones de la fábrica.
Para aumentar la presión, el 11 de diciembre se informó repentinamente a los miembros de BCTGM en la planta de la compañía en Londres, Ontario (Canadá) que su planta cerraría en en correr del 2014, perdiéndose así 500 puestos de trabajo sindicalizado. Parte de la producción irá a Memphis, donde la compañía espera fabricar el producto con mano de obra eventual, otra parte irá a una planta no sindicalizada de Belleville, Ontario, abierta el año pasado.
Los trabajadores/as de Memphis y sus sindicatos están batallando por el futuro de la próxima generación de trabajadores/as de Kellogg's y por la defensa de normas negociadas contra la expansión de los empleos descartables.
