Las actualizadas Directivas OCDE para Empresas Multinacionales fueron oficialmente aprobadas en París el 25 de mayo, abriendo nuevas posibilidades para que los sindicatos utilicen los procedimientos. Las Directivas actualizadas contienen un nuevo capítulo que detalla su aplicación a cadenas de suministros y formas de relaciones de negocios que antes habían escudado a las empresas de sus responsabilidades y obligación de rendir cuentas, como los acuerdos de licencias y de concesión. Un nuevo capítulo sobre derechos humanos especifica una gama más amplia de instrumentos de derechos humanos que sirven como referencia para el comportamiento empresarial. Y el capítulo del empleo – el más utilizado por los sindicatos para presentar denuncias conforme a los procedimientos de la OCDE – ha sido ampliado a fin de incluir importantes elementos de la Declaración Tripartita de la OIT sobre Empresas Multinacionales y Política Social.
La UITA participó activamente en cada etapa del proceso de actualización, así como en la elaboración de los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos elaborados por el Representante Especial de la ONU para Empresas y Derechos Humanos, John Ruggie, que sirvieron como referencia para secciones clave de la actualización. La Comisión Sindical Consultiva ante la OCDE (CSC) merece el reconocimiento del movimiento laboral y sus aliados por el compromiso y competencia que aplicaron para garantizar el máximo aporte sindical durante todo el proceso, trabajo fundamental para lograr una actualización que fue, en verdad, una mejora.
Las Directivas continúan siendo en gran medida un trabajo en evolución. El uso eficaz de las Directivas se ha visto siempre dificultado por la ambigüedad del texto (ahora remediado en parte) y, en la práctica, por la estudiada negativa de los Puntos Nacionales de Contacto claves a aplicarlas de manera imparcial – o incluso a aplicarlas. Las Directivas actualizadas ofrecen algunas mejoras en esta área pero carecen de normas claras de procedimiento. Los sindicatos insistieron desde el comienzo del proceso de actualización que esas reglas eran fundamentales para hacerlas funcionar. Los sindicatos que procuren utilizar las Directivas de modo efectivo deberán continuar presionando para que el sistema de Puntos de Contacto Nacionales funcione como es debido. La experiencia de la UITA con las Directivas - si bien frustrante como lo ha sido en muchos momentos y lugares - ha demostrado que puede valer la pena el intento.