En tanto que las organizaciones sindicales articulan una jornada de acción en toda Europa para el 29 de setiembre contra las políticas de austeridad, las centrales sindicales nacionales de España -- CC.OO y UGT– preparan una huelga general a escala nacional en el mismo día.
Las organizaciones sindicales españolas están rebatiendo una doble agresión. Los bancos, los comerciantes y los especuladores, encabezados por el FMI, han exigido medidas drásticas para garantizar sus bonos. En mayo, los socialistas en el gobierno impulsaron un paquete de austeridad por 15 mil millones de Euros (USD 18.500 millones), que comprendió enormes recortes en el gasto público y la inversión, así como una rebaja del 5% en los salarios del sector público. El segundo ataque llegó con un paquete de 'reformas' del mercado laboral, iniciado primeramente en junio por decreto gubernamental y completado por el Parlamento el 9 de setiembre, el cual permite a las compañías despedir a los trabajadores/as de forma más fácil y más económica.
En la primera de una serie de entrevistas con miembros de la UITA acerca de la huelga proyectada, la UITA conversó con Javier González Martino, Secretario General de la Federación de Comercio, Hostelería y Turismo de Comisiones Obreras (FECOHT-CC.OO [1]).
No solamente el Gobierno español, sino también la UE, el G20, los grandes protagonistas financieros y el FMI, todos dicen ahora que pasó el tiempo de ofrecer estímulos: los gobiernos necesitan austeridad para poner en orden su política económica. La huelga programada es un rechazo categórico a esta línea. ¿Por qué piensa usted que la austeridad no es la solución y qué medidas concretas propone para estimular la creación de empleos, la inversión real y un fuerte sector público?
CC.OO propone una reforma del sistema financiero que garantice el control y el flujo de los créditos a familias y empresas; una política industrial, energética y educativa que posibilite un cambio del modelo de crecimiento basado únicamente en la construcción y las burbujas inmobiliarias; y una reforma fiscal que luche contra el fraude.
Las organizaciones sindicales hemos querido abordar la negociación con disposición de alcanzar un gran pacto nacional, que permitiera a nuestro país afrontar en mejores condiciones la crisis. La nefasta intervención del Gobierno, con el aplauso de la patronal, dio al traste con la buena voluntad de las federaciones sindicales CC.OO y UGT. Hemos propuesto otras opciones y otras políticas, encaminadas a reducir el déficit publico mediante la búsqueda del incremento de los ingresos y haciendo aflorar la economía sumergida. También abordamos una reforma del sistema de negociación colectiva reforzando el mismo, la defensa del sistema público de pensiones y corregir el abuso de las contrataciones precarias y de los contratos temporales.
Por ultimo, CC.OO ha expresado su oposición a elevar la edad de jubilación a 67 años, porque supone una medida extremadamente innecesaria. En su lugar, apostamos por reforzar los mecanismos flexibles de jubilación voluntaria ya existentes
¿Cómo están articulando el apoyo para la huelga, no solamente con sus miembros, sino extendiéndose como parte de una movilización más amplia?
La convocatoria a una huelga general para el 29 de setiembre es la respuesta a la mayor agresión cometida al derecho del trabajo en los últimos 30 años. Lo lamentable es que está siendo perpetrado por un Gobierno que se dice de izquierdas y que está contando con el aplauso de los empleadores.
En CC.OO, estamos convencidos que la reforma laboral tendrá un rechazo masivo de los trabajadores y trabajadoras que lo expresarán el próximo día 29 de setiembre. Estamos en pleno proceso informativo – en todos los centros de trabajo y al conjunto de ciudadanos – de los motivos y alternativas que proponemos las centrales sindicales. CC.OO y UGT realizaron un llamamiento a los movimientos sociales, fuerzas de la cultura y personas de izquierda a ejercer un papel activo y a participar en la huelga general del día 29 de setiembre por los derechos de los trabajadores y trabajadoras.
Y más allá del 29 de setiembre ¿qué pasará?
Ahora, más que nunca, continuaremos la lucha para restituir los derechos robados por el actual Gobierno. Para nosotros, es fundamental no olvidar que las exigencias de la Unión Europea y los mercados financieros están sacrificando los derechos de los trabajadores. Se debe combatir a los grupos y personas que han provocado la actual crisis económica y financiera mundial. El conjunto del sindicalismo europeo y mundial debe generar alternativas que mejoren y consoliden el estado de bienestar social a nivel global.
En nombre de FECOHT-CC.OO, quiero agradecer todas las muestras de apoyo y solidaridad que estamos recibiendo del sindicalismo europeo.