Wu Guijun, un trabajador migratorio empleado durante 9 años confeccionando muebles en la Fábrica de Productos Diweixin en Shenzhen (China meridional), está detenido desde el 23 de mayo y afronta un proceso criminal por defender los derechos de sus compañeros de trabajo. Desde su arresto, se le ha negado a Wu el contacto con su familia. ¡ENVÍE UN MENSAJE A LAS AUTORIDADES GUBERNAMENTALES EXIGIENDO SU LIBERACIÓN! [1]
Los trabajadores y trabajadoras en la fábrica que es propiedad de Hong Kong procuraron iniciar negociaciones a principios de este año como reacción a la preocupación por los recortes en la producción y los aparentes preparativos de reubicación a otro establecimiento en el interior de China. Fueron elegidos siete trabajadores para representarlos, incluido Wu, pero el empleador se rehusó a dar a conocer toda información y rechazó las negociaciones. En respuesta, los trabajadores/as paralizaron las actividades el 7 de mayo y requirieron la intervención del gobierno local. El 23 de mayo, 300 trabajadores/as fueron acorralados por la policía cuando marchaban hacia la Municipalidad y más de 20 fueron arrestados y detenidos, incluido Wu Guijun. Eventualmente todos fueron liberados, excepto Wu. Según su abogado, actualmente Wu afronta un proceso criminal por "congregar a una multitud para perturbar el orden social".
El caso de Wu no es siquiera el único (ver: “China: los derechos de los trabajadores y el espejismo de la 'reforma'“ que incluye una lista de trabajadores/as y militantes de derechos laborales que actualmente cumplen condenas desde 2 años a perpetuas por haber defendido los intereses de la clase trabajadora http://cms.iuf.org/?q=node/2793 [2]).
El 1º de octubre, la Hong Kong Confederation of Trade Unions (HKCTU) efectuó una concentración de solidaridad en la Oficina de Enlace del Gobierno Popular Central en Hong Kong. El presidente de HKCTU, Cheng Ching-fat, declaró al 1º de octubre como "Día Nacional de la Ira" debido que a los trabajadores/as chinos aún se les niegan sus derechos humanos básicos para organizarse, negociar y efectuar huelgas. La organización sindical exigió la liberación de Wu Guijun y de todos los trabajadores/as chinos penalizados por su defensa de los intereses de los asalariados y por la reforma de la legislación china de tal modo que garantice estos derechos fundamentales.
Demuestre su apoyo y solidaridad con Wu Guijun y los trabajadores/as de China – PULSE AQUÍ PARA ENVIAR UN MENSAJE A LAS AUTORIDADES CHINAS [1] – ¡Hacer huelga no es un delito!