El volumen de trabajo no es lo único que ha aumentado en Nestlé Waters Direct en Domodedovo, Rusia. El sindicato de trabajadores de Domodedovo percibe una conexión directa entre el brutal incremento de las horas de trabajo y los 6 accidentes de tráfico que ocurrieron en otros tantos meses - 3 de ellos por sí solos en la semana reciente.
A raíz que la compañía clausuró uno de sus tres depósitos de distribución en la región de Moscú en noviembre del 2008, se necesitan jornadas de 12 horas e incluso 15 y 16 para alcanzar un nivel razonable de paga, bajo un sistema que requiere que los conductores carguen y entreguen manualmente botellas de agua de 20 kilos en unos 36 repartos separados por día (pulse aquí por antecedentes [1]).
El 5 de abril, un accidente tuvo que ver con un camión cargado con 180 botellas de agua – cuando las normas de seguridad fijan un máximo de 140. La explicación oficial fue que el conductor del reparto había excedido el límite de velocidad. Los trabajadores afirman que la tensión y los vehículos sobrecargados componen una fórmula para accidentes.
Bajo este sistema de remuneración, no se pagan horas extraordinarias de trabajo – se trata de una tarifa a destajo más bonificación. Algunos conductores que se afiliaron al sindicato fueron reasignados a vehículos más pequeños, lo cual les dificulta o imposibilita alcanzar sus cupos – por lo cual salen en sus recorridos en vehículos menores de lo normal, con toneladas de carga suelta.
El 6 de abril, ocurrió otro accidente por falla en los frenos. Según el sindicato, el aumento de la velocidad significa que casi la mitad de todos los vehículos salgan del depósito con problemas mecánicos.
El 12 de abril, el vehículo de servicio del conductor Dmitry Kotelniko fue aplastado en un choque casi mortal por un vehículo de transporte pesado. Tras estar inconsciente durante 48 horas, continúa en cuidado intensivo con heridas graves en la cabeza. En tanto que el accidente aún es investigado oficialmente, el sindicato cree que fue el resultado de la caótica programación que resulta de la eliminación de la mitad de los expedidores, dejando a los supervivientes con el doble de trabajo. El día del accidente, la ruta del conductor comprendió repartos locales en Domodedovo y una única entrega más lejos, de docenas de kilómetros ida y vuelta a Moscú – el viaje que lo destinó a la unidad de cuidado intensivo.
Desde su establecimiento el año pasado, la organización sindical ha reclamado, sin éxito, negociaciones sobre programas de trabajo, horas extraordinarias y pago de bonificaciones. Nestlé respondió con medidas disciplinarias de trabajo, recortes salariales y el despido del vicepresidente del sindicato.