Las organizaciones sindicales que representan a los trabajadores/as que se desempeñan en el procesamiento avícola en Estados Unidos se han manifestado vigorosamente contra una nueva propuesta de reglamentación promovida por la industria, a fin de reemplazar a los inspectores gubernamentales por la “auto-inspección” de la propia industria y permitir una importante aceleración de las ya peligrosamente rápidas líneas de procesamiento de aves.
Bajo la modificación propuesta a las reglamentaciones del Food Safety and Inspection Service (FSIS) las velocidades de las líneas de elaboración podrían incrementarse de las actuales 80-140 aves por minuto hasta 175 aves por minuto, asignando al mismo tiempo a los trabajadores/as la tarea de ¡“inspeccionar” cada ave! La modificación de la reglamentación está siendo promovida como un “Sistema de Inspección de Matanza Basado en la Salud Pública”. a pesar de la epidemia de lesiones de los trabajadores/as, los altos niveles de productos contaminados y una montaña de pruebas que vincula las velocidades de procesamiento con altas tasas de accidentes e incapacitantes lesiones por esfuerzo repetitivo.
UFCW, la mayor organización sindical que representa a trabajadores/as avícolas de EE.UU., criticó agudamente al FSIS por incluir en las reglamentaciones propuestas su defensa de una mayor productividad y flexibilidad que beneficiaría a las compañías, al tiempo que excluyó la consideración del impacto de la aceleración de las líneas de elaboración sobre los trabajadores/as.
El Presidente Internacional de UFCW, Joe Hanson, instó al gobierno a aplazar indefinidamente los cambios en las reglamentaciones propuestas, en espera de un estudio exhaustivo de la salud y seguridad en el lugar de trabajo de la industria avícola y subraya que “La única forma de realmente garantizar siempre alimentos seguros es contar con trabajadores/as seguros” (La declaración de UFCW relativa a Velocidades de las Líneas de Elaboración, Lesiones de los Trabajadores/as e Inocuidad de los Alimentos está disponible aquí [1]).
En Australia, la National Union of Workers (NUW) se está basando en su exitosa huelga [2] del año pasado contra la eventualización en gran escala en un establecimiento avícola de Baiada Poultry y el lanzamiento de su campaña "Mejores Empleos para Mejores Aves", dirigida a ganar empleos permanentes, lugares de trabajo más seguros y la producción de mejores aves.
NUW publicó ahora los resultados de su encuesta sobre establecimientos de trabajo. El informe disponible aquí [3] enfatiza los inmensos costos para los trabajadores/as y consumidores resultantes de la implacable iniciativa de la industria por rebajar los costos laborales. No sólo están en alza en Australia las intoxicaciones y muertes por envenenamiento de alimentos, la mayoría de las cuales son causadas por las bacterias salmonella y campylobacter que se encuentran principalmente en las aves. El informe destaca las investigaciones recientes revelando que el impacto de estas dos bacterias es mucho mayor que lo que expresan solamente las cifras de muertes: la exposición a estas dos bacterias puede triplicar las probabilidades de una persona promedio de morir por infección o cualquier otra dolencia en el lapso de un año.
El informe contiene pruebas de subcontratación en gran escala en Baiada (el productor más grande de Australia) y otras compañías mediante esquemas de contratación y otras formas de tercerización del empleo, vinculando esto a condiciones inseguras de trabajo y una creciente incidencia de productos contaminados. Los trabajadores/as avícolas empleados indirectamente, además de trabajar por salarios escasos bajo condiciones arriesgadas, son típicamente poco adiestrados, transitorios y tienen muchas más probabilidades que sus colegas directamente empleados de morir, lesionarse o enfermarse en el puesto. Entre las reglamentaciones clave de políticas estipuladas por escrito figura la exigencia de una regulación estricta del trabajo indirecto. Para NUW, mejores lugares de trabajo son la base indispensable para mejores aves.
En Brasil, donde las lesiones profesionales son extremadamente altas, la lucha para aminorar las líneas de procesamiento ha estado en el centro de la campaña de la UITA y sus afiliadas para reforzar la sindicalización y cambiar la forma en que opera la industria avícola. Las velocidades de las líneas de procesamiento figuran entre las más elevadas del mundo, en tanto que los bajos costos de producción han colocado a Brasil como una principal plataforma exportadora. La reciente fusión de Sadia y Perdigão resultó en la creación de una nueva compañía llamada Brasil Foods (BRF), que ahora controla el 25 por ciento del mercado avícola mundial.
Este año, la Confederación Nacional de Trabajadores de la Alimentación (CONTAC) llevó su campaña en favor del trabajo decente en la industria avícola al Foro Social Temático de Porto Alegre, convocado del 24 al 29 de enero a los efectos de preparar las reuniones del Grupo de Río+20.